Utilidades de embotelladoras caen hasta 22% en un 2014 “particular”
El crecimiento del sector estuvo lejos de los dos dígitos que se lograban en 2013.
- T+
- T-
Un año complejo para la industria de bebidas fue 2014. El impacto de la reforma tributaria -por el alza de impuestos a las bebidas alcohólicas y azucaradas- y el incremento en la inversión en marketing, para enfrentar la mayor competencia, mermaron los desempeños de los principales actores del sector, cuyas utilidades llegaron a caer hasta 22%.
Si a esta contingencia se agrega la depreciación de las monedas de la región, la desaceleración del consumo y la inflación, se advierte un cierre de año "particular", como lo tildó CCU en sus estados financieros.
El mayor castigo lo registró Coca-Cola Embonor, cuya utilidad disminuyó 22,5%, totalizando $ 22.358 millones. Sus ventas llegaron a 251,4 millones de cajas, con un alza de 3,6%, la mitad de lo logrado en 2013.
Embotelladora Andina mostró un descenso en su utilidad del 15,2%, logrando $ 75.490 millones. Su volumen de ventas mejoró un 0,6%.
En CCU la utilidad se redujo un 2,8%, a $ 119.557 millones, y su volumen de venta aumentó 4,5%, lejos del crecimiento de dos dígitos de 2013.
Potenciando marcas
Producto de la desaceleración del consumo que se registró en Chile, Brasil y Argentina -lo que afectó, en especial, a CCU y Andina-, estas firmas elevaron sus inversiones en marketing para potenciar sus marcas.
Es el caso de CCU. La compañía ligada al grupo Luksic se vio impactada en $ 8.324 millones por este concepto, lo que se explica principalmente por el aumento de la inversión para promocionar su línea de cervezas y traer nuevas marcas. En Chile, vieron mayor competencia de AB Inbev, mediante su filial Cervecerías Chile.
"En el caso de Andina y Embonor el aumento en gastos de marketing ha sido en menor medida, para mantener sus marcas presentes y fuertes, en un escenario de menor consumo", dice Tomás Sanhueza, analista de IM Trust.
Volúmenes
El volumen de ventas fue inferior en Chile y no así en otros países. Esto se vio con mayor claridad en el cuarto trimestre, con la aplicación de la reforma tributaria. Por ejemplo, Andina disminuyó 5,2% en ese período.
Respecto a 2015, el mercado prevé resultados presionados, con crecimientos débiles y márgenes bajos.